PLIEGO
Tiene la estructura de las antiguas alquerías islámicas y la tranquilidad de un pueblo de agricultores. Porque la mayoría de los 3.400 habitantes de está villa, situada en las estribaciones de Sierra Espuña, se dedican fundamentalmente a trabajar la tierra. Y los frutos que obtienen han ganado merecida fama, sobre todo, los albaricoques.
Domina Pliego un castillo construido por los árabes allá por el siglo XII. Hoy quedan aún parte de la torre principal y la antemuralla. El caserío mudéjar no estaba defendido por una muralla alguna, sino por el sistema defensivo conocido como casamuro: el perímetro externo del poblado no tenía espacios vacíos entre las viviendas y sólo había una entrada.
Hay que visitar la iglesia de Santiago Apóstol, erigida en el siglo XVI por la orden del mismo nombre; la ermita barroca de la virgen de los Remedios y la Torre del Reloj. Muy cerca se encuentra el poblado de la Mota, primer emplazamiento de la villa.
El cercano Parque Natural de Sierra Espuña ofrece un sinúmero de posibilidades: senderismo, cicloturismo, espeleología, escalada…Y para alojarse hay casas rurales y un albergue.
